Gracias – Agradecimiento
He pensado mucho en ti, que me lees. Y en ti, que aún no me has leído. Incluso en ti, que no lo harás nunca.
He estado contigo a pesar de que, aparentemente, “sólo” estaba conmigo. Y te quiero dar las gracias por eso. Ahora tocaría linkar alguna de las muchas versiones que se han hecho del “Gracias a la vida” de Joan Baez. “Gracias a la vida, que me ha dado tanto…” empezaba diciendo la Baez en esa canción.
Y eso es dar las gracias por lo que ha ocurrido. Y sí, quiero darte las gracias por todo. Y podría nombrarte. Te podría nombrar a ti Carmen, aunque no me leerás, por enseñarme todo eso “que viene de madre” y por ser el catalizador de este blog. A ti Montse, Joel, Eduardo: Por hacer posible tantas cosas. A ti Cris: y no por acompañarme, sino por dejarme a mí hacerlo. A ti David y a ti Cristina, por haberme dado sólo satisfacciones y retos. A ti Montse, Jorge, Nuria, David, Laura, Neus, Ramón, Abel, Albert, Roser, Dori, Ximo, Francesc… porque has creído ciega y firmemente en mi en muchas ocasiones. O sólo en algunas: Pero lo has hecho en esas en las que es más fácil dudar y huir. A ti Víctor, Lluís, Sisco… por darme tu amistad en esa época de la vida en la que eso es lo único importante. A ti Pepe, a ti Tonin por estar siempre ahí detrás, sin que se os vea, pero siempre notándoos. A ti Pedro, sin ti no serían posibles ni esta entrada ni otras tantas (Incluso algunas “salidas”). A ti Juan Carlos, por darme a conocer el link con el que se cierra esta entrada. A ti que estás leyendo esto y has llegado hasta aquí en la lectura a pesar de no conocer a nadie de los nombrados. Quizá esperabas ver el tuyo. Pues si no estaba en este párrafo es que está en el siguiente. Verás…
Me gusta diferenciar entre “dar gracias”… Y “mostrar agradecimiento”. “Dar gracias” lo entiendo mirando por el retrovisor. “Mostrar agradecimiento” se hace mirando hacia adelante. A los del párrafo anterior les doy las gracias. Y también, como a ti, les quiero mostrar mi agradecimiento.
Gracias a todos por existir. Pero…
A ti ________ (Pon aquí tu nombre), quiero agradecerte, además de el haber leído hasta aquí, el que decidas quedarte conmigo.
Somos lo que hacemos de nosotros. Soy lo que hago de mí. Eres lo que haces de ti.
Soy lo que hago de mí, con propósito: Con sentido.
Y AL HACERME ASÍ CONTIGO, TU Y YO, JUNTOS, ESCULPIMOS LOS CONSIGOS.
Así, todo lo que queramos conseguir, es posible.
Soy lo que hago de mí, lo que hago de mí ahora.
Ahora, para ti.
Quédate conmigo
Te abrazo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me quedo contigo sin dudarlo ni un instante. Porque contigo aprendo siempre.
ResponderEliminarStand by me doncs Francesc.
ResponderEliminarA great pleasure!
ResponderEliminarGracias David por ser agradecido. Por pensar en cada uno de los que te seguimos a veces en la distancia, otras veces "distanciados" así como de refilón, pero algo se nos pega siempre que nos topamos con algo publicado en el twitter o en el FB por tí. Gracias por el contenido de este artículo y por tu inspiración de vida. Gracias por ser ORIGINAL y no fotocopia. De corazón, desde el otro lado del Átlántico Gracias!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarAlguien dijo que jamás una lágrima podría mojar un e-mail.
ResponderEliminarNo es el caso de mi teclado.
Y sin embargo, mis labios dibujan una sonrisa.
En vida vostra decia mi padrí.
Paco Morales: AMAR SIGNIFICA TENER UN TÚ EN EL QUE MIRARSE Y..........SONREIR.
ResponderEliminarEste eres tú Paco, sonriendo desde el otro lado del Atlántico. Y haciéndome sonreir a mí en este.
Xatín... Vamos a conseguir los consigos. A pesar de que nunca lo he dudado, tambien nunca he tenido la certeza. Estoy contento porque el atajo... no nos ha hecho olvidar el camino.
ResponderEliminar